Seguro que no hay nadie en el mundo que al levantarse se haya llevado un buen susto al mirarse en el espejo y encontrarse con las famosas ojeras. Y no, esto no implica obligatoriamente que no hayas dormido, ya sea por buenas o por malas razones.
Las ojeras las padecen tanto los hombres como las mujeres y tienen diferentes orígenes. Al localizarse en la parte donde la piel es más sensible, bajo los ojos y en el contorno de éstos, las venas se transparentan bajo la piel.
Asimismo, dependerá del grosor de la piel, de la pigmentación, del color y de la calidad que cada uno tengamos. A medida que envejecemos, la superficie cutánea se daña y acrecienta su finura, por lo que las ojeras se aprecian cada vez más. Ahora bien, ¿por qué salen las ojeras?
Normalmente las ojeras salen por cuestiones hereditarias, es decir, que si tus padres o abuelos tienen ojeras, seguramente tú también las tendrás. Otra razón está vinculada a la raza, ya que ciertas etnias tienden a desarrollarlas más, como las de raza mediterránea, que poseen más pigmentación que otras razas menos oscuras. El exceso de pigmentos se amontona bajo los ojos y provoca la ojera.
Sin embargo, en otras ocasiones no son producidas por las razones anteriores, sino que se presentan eventualmente por una simple cuestión cutánea. Al ser la piel de los ojos tan fina (en milímetros no llega a los 0,5), si estamos muy cansados, las venas se inflaman y consecuentemente destacan en relación al resto de la piel. Asimismo, a medida que envejecemos, las ojeras se ven más.
Ahora bien, si las ojeras son de color azulado es porque los vasos sanguíneos están dilatados bajo los ojos. En otras ocasiones, pueden aparecer por enfermedades como la alergia, el eczema, o la conjuntivitis que provocan picor en los ojos, lo que irrita la parte de abajo de los ojos.
¡Pero no te preocupes! Hoy en día existen diferentes remedios que ayudan a corregir las ojeras, como la radiofrecuencia, y soluciones naturales como:
- Dormir boca arriba y con almohada: para mejorar la circulación.
- Hielo: el frío también ayuda, ya que disminuye la inflamación de los vasos sanguíneos.
- El pepino: sus vitaminas mejoran la pigmentación, la laxitud y las arrugas finas.
- Un labial rojo: sirve para disimularlas. Aplícalo con una esponjita por la zona y difumínalo con una brocha. A continuación, puedes ponerte corrector.
¡Es hora de que abandones el lado oscuro!